Dicen que lo del Corona Virus o Covid 19 es un invento... Dicen que los gobiernos estaban perdiendo el control sobre nosotros y tenían que hacer algo para meternos en cintura, Dicen que los viejitos y los enfermos les cuestan mucho a los gobiernos y que por eso se inventó este virus para borrarnos del mapa... dicen...
Lo cierto es que si querían asustarnos ya lo lograron... ya podemos volver a la normalidad?
Ojalá fuera así de fácil, por el día uno trabaja y como quiera se le olvida, pero en la noche es el problema, cuando todas las noticias dan vueltas en tu cabeza, cuando no sabes qué pensar, pero piensas que la vida está pendiendo de un hilo,.. Tú vida, la vida del vecino, del que pasa por enfrente de tu casa, el que sale a pasear a sus perros como si no pasara nada.
Y miro al cielo y a pesar de que hay mucho menos tráfico y mucho menos gente por las calles, el cielo permanece con un velo blanco apocalíptico.
Y pienso... cuántas veces me paré en medio de una habitación y le dije a Dios: Dios, no podemos seguir viviendo así con miedo. Todos los días desapariciones de niños, niñas, jóvenes y jovencitas.
Todos los días oyendo malas noticias, asesinatos, inhumanidades, maltrato de animales. Tantas muestras de insensibilidad en todos los sentidos. En niños, adultos, tanto hombres como mujeres.
Y ahora... de que me quejo?, no acaso lo que está sucediendo en el mundo va a cambiar nuestro panorama?... Cuando va a terminar esta pesadilla?
Esto apenas empieza y cómo quisiera que nunca hubiera existido, cómo quisiera no estar consciente de que lo peor aún esta por venir. Porque si esto no es un sueño, ni un invento, las cosas se van a poner muy feas y no sé si tenga la fuerza suficiente para soportarlo.
El valor sólo es saber manejar el miedo. Ese miedo oscuro para enfrentar nuestro destino.
Y no es que sea pesimista, sólo es que necesitaba sacar lo que estoy sintiendo, lo que hace que me tiemblen las piernas y las manos. A lo que más temo es al propio ser humano, que a veces saca su peor cara y sus peores instintos.
Sólo dame tu mano para sentirme más fuerte y caminemos de frente aunque no sepamos que hay más allá de esa neblina.
Entre el silencio y la soledad... la locura carcome un corazón herido.
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