Vengo a ti, Jesús, para que me acaricies antes de que empiece mi jornada.
Que tus ojos se posen un instante en los míos.
Déjame que lleve a mi lugar de trabajo la certeza de tu amistad.
Llena mi espíritu para que soporte el desierto del ruido.
Que tu resplandor bendito recubra la cima de mis pensamientos.
Y concédenos la fuerza para quienes necesitan de mí."
Que tus ojos se posen un instante en los míos.
Déjame que lleve a mi lugar de trabajo la certeza de tu amistad.
Llena mi espíritu para que soporte el desierto del ruido.
Que tu resplandor bendito recubra la cima de mis pensamientos.
Y concédenos la fuerza para quienes necesitan de mí."
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