Señora Ira, Señora Tristeza (fábula)
2 de mayo de 2012 a la(s) 4:53
Alguna vez hemos disfrazado tan bien lo que sentimos que logramos engañarnos a nosotros mismos. Esta narrativa lo detalla.
“La Ira y la Tristeza fueron a bañarse un día. La Sra. Ira se quitó su ropa violenta y desesperadamente para ir al agua. La Sra. Tristeza, por su parte, cabizbaja y sumida en su propia autocontemplación, se desnudó sin siquiera fijarse donde dejaba sus prendas.
Al tiempo, se percataron que alguien se acercaba. Ira con su ímpetu ciego salió del agua colocándose la ropa que primero miró, más concentrada en lo que sucedía a su alrededor, a la defensiva. Tristeza, salió con una paciencia moribunda, y se dio cuenta que la ropa que se había llevado la señora Ira era la suya. Con una actitud conformista y derrotista se la colocó sin decir más…”
Esta narrativa es muy cierta. Nuestra tristeza se disfraza de ira, nos coloca alertas y ciegos de las opciones y de las verdades. Y nuestra ira, carga sobre sí una tristeza y una frustración sumisa.
¿Quién nos libera de esto? Nuestras actitudes, hacer un alto y analizar quién se equivocó de prendas y remediarlo nos puede cambiar no solo el día, sino el mes entero.
¡Feliz día!
“La Ira y la Tristeza fueron a bañarse un día. La Sra. Ira se quitó su ropa violenta y desesperadamente para ir al agua. La Sra. Tristeza, por su parte, cabizbaja y sumida en su propia autocontemplación, se desnudó sin siquiera fijarse donde dejaba sus prendas.
Al tiempo, se percataron que alguien se acercaba. Ira con su ímpetu ciego salió del agua colocándose la ropa que primero miró, más concentrada en lo que sucedía a su alrededor, a la defensiva. Tristeza, salió con una paciencia moribunda, y se dio cuenta que la ropa que se había llevado la señora Ira era la suya. Con una actitud conformista y derrotista se la colocó sin decir más…”
Esta narrativa es muy cierta. Nuestra tristeza se disfraza de ira, nos coloca alertas y ciegos de las opciones y de las verdades. Y nuestra ira, carga sobre sí una tristeza y una frustración sumisa.
¿Quién nos libera de esto? Nuestras actitudes, hacer un alto y analizar quién se equivocó de prendas y remediarlo nos puede cambiar no solo el día, sino el mes entero.
¡Feliz día!
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