José María Napoleón sigue en la lucha
El cantante presentó su disco Vive, que incluye parte de sus éxitos plasmados al lado de compañeros y amigos del medio31/01/2016 02:57 EVA DÍAZ MORENO
Fotos: Jaime Boites
CIUDAD DE MÉXICO.
La mujer como objeto de desprecio es una de las constantes que el cantante José María Napoleón ve en la música actual y aunque tiene 46 años de carrera artística y muchos éxitos en su haber, el intérprete de Vive y Hombre, aseguró que no juzga, pero que sí le da coraje y tristeza.
“Actualmente en la música suenan muchísimas cosas, no soy nadie para juzgar y mucho menos quién para decir para dónde debe ir el cauce. Lo que sí me queda claro es que a veces escucho cosas que me dan coraje y tristeza porque siento a la mujer menospreciada. Imágenes que nos son las adecuadas y creo que en mis canciones, siempre, y no por una pose, sino por una necesidad de sentirlo, lo que más he admirado en la vida y he respetado es a la mujer, por lo que significa, lo que vale y lo que entrega”, dijo en conferencia de prensa.
“He cometido errores... No soy quién para juzgar, pero creo que la música carece de valores, y si se cantan estas canciones simplemente las escucho, aunque también rescato lo bueno, que sí hay”, ahondó.
El intérprete presentó su disco Vive, que es una recopilación de 18 de sus éxitos, con nuevos arreglos de Abraham Laboriel, Ramón Stangnaro, Alejandro Carballo, Aneiro Taño y Kenny O’Brien.
En este disco hace dúos con compañeros de la escena musical como Yuri, María José, Mon Laferte, Manoella Torres, Luis Humberto —vocalista del grupo Enjambre—, Beto Zapata —del Grupo Pesado— y su hijo José María.
“Al principio pensé en no hacerlo, pero siempre he pensado que el hombre es tan grande como sus sueños y tan pequeño como su voluntad. No sé qué va a pasar con este álbum, pero creo que cosas buenas”, comentó.
Finalmente, Napoleón, quien el 5 de junio se presentará en el Auditorio Nacional, aseguró que jamás se cansará de cantar.
“Hay momentos en que el cuerpo se agota de andar de un lado a otro, pero cada vez que salgo a un escenario, donde sea, en la calle o en el AuditorioNacional, lo respeto mucho y lo que saco sirve para mis 70 niños de nuestra Casa Hogar en Aguascalientes o para los trasplantes de riñón; todo es sagrado, nunca, jamás me cansaré de cantar mis canciones, no me han aburrido, siempre reinvento mis historias”, concluyó.
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