Meditación para crear el amor
El amor a uno mismo es la base de nuestra vida "Ama a tu prójimo como a ti mismo", si nosotros no nos amamos, estamos incapacitados para amar a los demás.
Amarnos a nosotros mismos es elegir el bien para nosotros, elegir el amor, la felicidad, la abundancia, el perdón, la comprensión,... en fin, es aceptar lo que nos gusta de la vida, lo que nos hace bien y rechazar lo que nos disgusta, o nos daña. De la manera en que nosotros hagamos la elección estaremos actuando como imanes de dichas cosas.
Respira profundamente varias veces y relájate... Comienza a imaginar que en este momento eres un escritor que está escribiendo un libro. Es un libro en el cual tú mismo eres el protagonista junto con muchas de las personas que han participado en tu vida y la ha conformado tal como es.
Has llegado a un punto en el texto en que necesitas identificar a alguien que tú sepas que te ama... Busca entre las personas de tu vida, entre las relaciones presentes o pasadas, familiares, o amigos, maestros, compañeros, hasta que encuentres a esa persona que tú sabes que te quiere.
Imagina que estás sentado frente a un escritorio donde hay una máquina de escribir o una computadora, papel, lápices. Frente a ti ves una ventana amplia que da a un jardín. Allí en el jardín, ocupada en alguna actividad propia, está esa persona especial que tú sabes que te ama.
En el libro que estás escribiendo has llegado a la parte en donde te toca describir a esa persona. Te apoyas en el respaldo de la silla y la miras, pensando en cómo expresar en verbo e imágenes aquello que diferencia a esa persona de las demás, en encontrar palabras que permitan al lector percibirla tal como tú la percibes. Empieza a describir sus características, su forma de hablar, su aspecto físico, sus gestos, sus actividades típicas, todo lo que hace que esta persona sea la persona que es. Su sentido del humor, su forma de moverse, su inteligencia, sus estados de ánimo, su manera de pensar y actuar, todo lo que hace que esta persona sea única en el mundo. Y escucha tu propia descripción, percibe los sentimientos que surgen y fluyen a medida que observas a esta persona del otro lado de la ventana.
Una vez terminada la descripción, imagina que te desplazas del lugar en que estás y comienzas a flotar alejándote del escritorio y dirigiéndote hacia el jardín.
Te acercas cada vez más a esa persona que está allí afuera hasta convertirte tú mismo en ella. En tu imaginación, ahora tú eres ella... Dejas la actividad que te ocupaba y, desde el jardín, miras hacia la ventana. A través de la ventana te ves en tu ubicación anterior, frente al escritorio escribiendo el libro.
Te observas a través de los ojos y el corazón de ese ser que te ama, quizás viendo por primera vez que es lo que ve una persona que te ama cuando te mira... Escucha atentamente y oye cómo una persona que te quiere describe tus gestos, tu forma de hablar, tu aspecto... Viéndote a través de los ojos de alguien que te ama descubres características y cualidades que desconocías en ti, rasgos que tal vez no percibías o que considerabas defectos...
Observándote a través de los pensamientos, percepciones, emociones y recuerdos de alguien que te quiere, descubres que eres digno de mucho amor que eres alguien que enriquece la vida de otras personas por el solo hecho de ser tú mismo... Registra todo cuanto esta persona aprecia y valora en ti.
Luego vuelve a tu propio ser recordando plenamente quién eres para alguien que te ama.
El amor a uno mismo es la base de nuestra vida "Ama a tu prójimo como a ti mismo", si nosotros no nos amamos, estamos incapacitados para amar a los demás.
Amarnos a nosotros mismos es elegir el bien para nosotros, elegir el amor, la felicidad, la abundancia, el perdón, la comprensión,... en fin, es aceptar lo que nos gusta de la vida, lo que nos hace bien y rechazar lo que nos disgusta, o nos daña. De la manera en que nosotros hagamos la elección estaremos actuando como imanes de dichas cosas.
Respira profundamente varias veces y relájate... Comienza a imaginar que en este momento eres un escritor que está escribiendo un libro. Es un libro en el cual tú mismo eres el protagonista junto con muchas de las personas que han participado en tu vida y la ha conformado tal como es.
Has llegado a un punto en el texto en que necesitas identificar a alguien que tú sepas que te ama... Busca entre las personas de tu vida, entre las relaciones presentes o pasadas, familiares, o amigos, maestros, compañeros, hasta que encuentres a esa persona que tú sabes que te quiere.
Imagina que estás sentado frente a un escritorio donde hay una máquina de escribir o una computadora, papel, lápices. Frente a ti ves una ventana amplia que da a un jardín. Allí en el jardín, ocupada en alguna actividad propia, está esa persona especial que tú sabes que te ama.
En el libro que estás escribiendo has llegado a la parte en donde te toca describir a esa persona. Te apoyas en el respaldo de la silla y la miras, pensando en cómo expresar en verbo e imágenes aquello que diferencia a esa persona de las demás, en encontrar palabras que permitan al lector percibirla tal como tú la percibes. Empieza a describir sus características, su forma de hablar, su aspecto físico, sus gestos, sus actividades típicas, todo lo que hace que esta persona sea la persona que es. Su sentido del humor, su forma de moverse, su inteligencia, sus estados de ánimo, su manera de pensar y actuar, todo lo que hace que esta persona sea única en el mundo. Y escucha tu propia descripción, percibe los sentimientos que surgen y fluyen a medida que observas a esta persona del otro lado de la ventana.
Una vez terminada la descripción, imagina que te desplazas del lugar en que estás y comienzas a flotar alejándote del escritorio y dirigiéndote hacia el jardín.
Te acercas cada vez más a esa persona que está allí afuera hasta convertirte tú mismo en ella. En tu imaginación, ahora tú eres ella... Dejas la actividad que te ocupaba y, desde el jardín, miras hacia la ventana. A través de la ventana te ves en tu ubicación anterior, frente al escritorio escribiendo el libro.
Te observas a través de los ojos y el corazón de ese ser que te ama, quizás viendo por primera vez que es lo que ve una persona que te ama cuando te mira... Escucha atentamente y oye cómo una persona que te quiere describe tus gestos, tu forma de hablar, tu aspecto... Viéndote a través de los ojos de alguien que te ama descubres características y cualidades que desconocías en ti, rasgos que tal vez no percibías o que considerabas defectos...
Observándote a través de los pensamientos, percepciones, emociones y recuerdos de alguien que te quiere, descubres que eres digno de mucho amor que eres alguien que enriquece la vida de otras personas por el solo hecho de ser tú mismo... Registra todo cuanto esta persona aprecia y valora en ti.
Luego vuelve a tu propio ser recordando plenamente quién eres para alguien que te ama.